En la antigua Roma se utilizaban termas como lugar de reunión, aquellas tenían un doble sentido, a la vez que se usaban para tratar asuntos políticos o sociales, servían para el aseo y la relajación, siempre teniendo presente la decoración y el ambiente.
Crear un espacio de relajación en casa puede resultar la terapia perfecta para quitarse el estrés acumulado diariamente.
Asociamos la idea de un descanso en un balneario o un spa para tratar el estrés, pero podemos obtener ese descanso tan merecido sin necesidad de desplazarnos a otro lugar, creándolo en nuestro propio hogar.
La gran variedad de aparatos para duchas y baños nos permite combinar materiales y colores ideales para crear el espacio de relajación.
Ante todo cuidaremos el orden y el espacio con el uso de muebles adecuados para guardar los aparatos que usemos en el baño, y de esta manera facilitar la limpieza y el orden.
Spa en casa
El uso de materiales de baja porosidad como el mármol o el granito nos ayuda a mantener la higiene y la calidad de los acabados.
Diferentes columnas de ducha nos ofrecen la posibilidad de generar un ambiente de pequeño spa en casa, el objetivo es combinar vapores con sonidos y texturas con colores para llegar a ese estado de relajación que deseamos.
Pensar en el bajo consumo de agua debe estar presente en cualquier reforma que hagamos en nuestro baño, las nuevas griferías nos aportan una sensación de mayor caudal a la vez que reducen el consumo.
La tendencia es conseguir un espacio de relajación con la fusión de diseño y confort donde el agua debe ser nuestro gran protagonista, sin olvidarnos de los sonidos y aromas.
Y como hacían los romanos, convertir el aseo en la terapia ideal para dejarnos el estrés.
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